Limpiar y cortar el pollo en octavos, guardando los menudos (hígado, corazón, estómago, cresta etc.).
Poner la manteca, el aceite y las cabezas de ajo a sofreír en la olla o cazuela.
Añadir el pollo y cocer hasta que esté dorado.
Retirar el pollo y agregar la cebolla picada y la ramita de canela.
Rehogar la cebolla hasta que esté dorada (de 8 a 12 minutos, dependiendo de la intensidad del fuego).
Reincorporar el pollo y añadir los menudos.
Sofreír todo hasta que los menudos estén hechos.
Agregar los tomates.
Cuando los tomates queden blanditos, añadir el caldo y reducir, hasta el punto justo, que el pollo quede jugoso sin que se pase de cocción, ni quede la salsa demasiado caldosa.
Retirar y dejar reposar unas horas antes de servir.